Comencemos a Movernos con libertad

Otro jueves más de mayo, en este caso el 9, no volvemos a reunir pero con la curiosidad de la actividad que realizaremos, se no dijo que teníamos que ingresar a clases con ropa cómoda y holgada porque no íbamos a mover.

Comenzamos la clase con un ejercicio de concentración, específicamente una caminata de concentración, luego comenzamos a saludarnos entre todos mediante el contacto de distintas partes de nuestro cuerpo y en completo silencio, primero un saludo de manos, luego una sacudida de hombros, un suave pellizco de mejillas, un saludo chocando las manos luego de saltar y choque de caderas para finalizar con un suave tirón de orejas.

Luego continuamos caminando pero en esta ocasión de espaldas hasta encontrarnos con  un(a) compañero(a), al encontrarnos comenzamos a realizar un saludo entre espaldas, una conversación sentir el contacto espalda con espalda y empezar a expresar emociones a través del contacto para finalmente separarse e ir cada uno por su camino dejando atrás aquella conversación sin palabras y llena de emociones.

Después nos juntamos en grupos,  cerramos los ojos y nos tomamos de las manos y así como con las espaldas comenzamos una conversación de manos, pero en este caso eran 2 personas distintas con las cuales se realizaba la conversación, en este momento se comenzaron a sentir todas las emociones, todas las energías que eran traspasadas a través del grupo de mano en mano y se iban formando lazos entre las personas de aquel grupo.

Luego comenzamos a sentir realmente el cuerpo. 

Nos ubicamos en un círculo gigante dentro de la sala  y comenzamos a movernos levemente, primero levantando los dedos de 1 mano, luego la otra, levantando las muñecas, levantando los hombros, moviéndonos todos al ritmo de la melodía de fondo, sintiendo como cada parte del cuerpo es capaz de moverse de una manera particular y única. Luego comenzar a mover los brazos, todavía recuerdo al frente, arriba, abajo, al lado casi en cualquier orientación toda dirección es capaz de captar el movimiento del cuerpo nos hay límites en cuanto a variedad de movimientos.

 Esta actividad resulta muy útil de realizar para demostrar que no es necesario saber bailar para comenzar a moverse, que cada parte del cuerpo puede ser usada para expresarse frente a otros, que cada movimiento permite expresar un sentimiento  y una sensación de lo que se vive, cada persona puede expresarse mediante movimientos en todas las direcciones y los limites cada persona sabe que tanto necesita moverse para expresar lo que siente.

Esta clase de actividades como grupo permite que se pierda el miedo al ridículo, que no hay persona que no realice los mismos movimientos que uno en un comienzo y que después si cada uno pone parte de su dedicación para realizar una composición en conjunto en la cual mediante movimientos simples se expresen sentimientos complejos al son de una melodía. Ya con poco más que decir me alegro de que se presenten este tipo de actividades para empezar a conocer métodos para expresarse libremente.